Siente correr el agua bajo tus pies y conviértete en un Zahorí. Con «El abuelo«, africano y ciego, nuestra familia de Mi saquito de huesos crece. Reúne losetas de huesos en tu tablero para completar el esqueleto de tu personaje, conoce a nuestra peculiar familia y ¡Canta!
Así se nos presenta esta primera expansión para el juego Mi saquito de huesos, publicado por Tamuz Games. Su autora es Beatriz Grifol y las ilustraciones las ha realizado Amelia Sales.
Ficha
- Número de jugadores: 2 a 5
- Edad Mínima: 4 años
- Duración: 15 minutos
- Interacción: Competitivo
- Mecánicas: Pattern Recognition, Tile Placement
- Versiones: No
- Expansiones: No
- Editor: Tamuz Games
- Año de publicación: 2021
¿Cuál es su contenido?
- 1 tablero de esqueleto – personaje
- 6 tokens de soplo – vida
- 11 losetas de esqueleto – personaje
- 3 losetas de desierto
- 4 losetas de saquitos de color
- 3 losetas de saquitos multicolor
- 3 tokens de soplos – personaje
- 1 reglamento
¿De qué trata?
Con la expansión «El abuelo«, el juego Mi saquito de huesos mejora en cuanto a número de personajes entre los que podemos elegir para darles vida y añade nuevas variantes al juego base, tanto si usamos su tablero como si no.
Nuevos componentes y todos los componentes relacionados con el abuelo africano de la familia multicultural para seguir viviendo aventuras y conociendo más los huesos del cuerpo humano.
¿Cómo se juega?
Una partida utilizando la expansión El abuelo se preparará y jugará igual que la de Mi saquito de huesos.
Podéis leer aquí en su reseña ambas fases.
Los cambios que aporta la expansión son los siguientes:
- Cuando utilizamos los tableros de otros personajes: Cada vez que nos encontremos con una loseta de «El abuelo» junto a otra que no sea de nuestro personaje, nos libraremos de perder el turno. Podremos colocar ambas en los personajes correspondientes.
- Cuando utilizamos el tablero de personaje de «El abuelo»: Cuando usemos la acción del saquito, robaremos, con los ojos cerrados, 2 losetas del saquito de otro jugador, sin tener que ser consecutivas.
Además, añade variantes a nuestras partidas:
- Variante 1: Utilizando los saquitos de color, sustituiremos 4 losetas de desierto del juego básico por saquitos de color. Cada vez que estén en nuestro poder robaremos 1 loseta del saquito del jugador al que corresponda ese color.
- Variante 2: Utilizando los saquitos multicolor, sustituiremos 3 losetas de desierto del juego básico por 3 saquitos multicolor. Para hacerlo, deberemos estar usando al abuelo en esa partida.
- Variante 3: Utilizando los soplitos multicolor, quitaremos 1 soplo del tablero del jugador que queramos.
- Variante 4: Utilizando los soplitos de personaje, que usaremos si juega el abuelo. Cuando tengamos que colocar 1 soplito y no nos queden más, recurriremos a los que están en el centro de la mesa y cogeremos el que corresponda a nuestro personaje. Hay que ser rápido ya que solo el del abuelo es el único que nadie más podrá robar.
Podremos mezclar las variantes y para ello habría que cambiar 7 losetas del juego básico.
Con ésta expansión también podemos utilizar la canción “Mi saquito de huesos”. Puedes descargarla aquí.
Fin de la partida
Al igual que en el juego base, la partida termina cuando se hayan acabado las losetas.
Puntuaremos de la siguiente manera:
- Obtendremos 2 puntos por cada loseta colocada en tu personaje.
- Ganaremos 1 punto por cada ficha de soplo de vida que tengamos en los tableros de otros jugadores.
Al igual que en el juego base, El Abuelo se sumará 1 punto por cada 2 soplos que tenga en su reserva.
Ganará el jugador que más puntos de victoria haya conseguido al final de la partida.
¿Cuál es nuestra valoración?
Gracias a El abuelo, podremos dar nueva vida a nuestras partidas del juego Mi saquito de huesos del que os hablamos aquí hace tiempo.
Viene en una caja bajita y cuadrada muy manejable que mantiene la estética del juego base, teniendo como protagonista en su portada al nuevo personaje de la familia que participará en nuestras partidas: el abuelo africano.
Dentro, tenemos los troqueles de buena calidad que da gusto destroquelar para encontrarnos con unas losetas gruesas y coloridas, como las que nos tienen acostumbrados del juego base.
Además, tenemos el tablero – puzzle de 4 piezas que uniremos para formar a nuestro abuelo. Es un nuevo personaje que podremos usar para nuestras partidas por lo que podremos ser uno más cuando juguemos a Mi saquito de huesos.
Es un juego y una expansión que no tienen dependencia del idioma ya que en sus componentes no incluyen textos y necesitaremos de una mesa para poder jugarlo y que todos los componentes estén estables sobre ella.
Queremos recalcar el aspecto educativo que tiene éste juego y su expansión ya que la editorial Tamuz, dirigida por Beatriz Grifol, ha pensado éste juego dedicado a los más pequeños para que se diviertan mientras aprenden conceptos del esqueleto y sus diferentes partes, el concepto de familia y el de explorar.
Como vemos en el puzle que creamos con cada uno de los personajes, tenemos a groso modo pero muy bien explicados los principales huesos que forman nuestro cuerpo. De esta manera tan divertida, iremos conociéndolos poco a poco y es una manera muy práctica para irlos aprendiendo y conociendo su forma y posición en el cuerpo humano.
Además de poderlo usar en casa y en los ratos de ocio de los más peques, le vemos un buen aprovechamiento si es usado en las aulas. Cada vez son más los profesores que incluyen en sus explicaciones una parte complementaria acompañada de juegos de mesa para que los alumnos se diviertan mientras están entretenidos y absorben nueva información sin apenas darse cuenta. En este caso, Mi saquito de huesos y su expansión mejorarán el conocimiento y las habilidades sociales entre compañeros por lo que es una muy buena opción para utilizar en clases sobre la anatomía humana y que aprendan a relacionar cada hueso con su posición en el cuerpo pasándoselo bien.
Nos gusta mucho también el aspecto multicultural que propone el juego y que se ve acrecentado con esta expansión en la que tenemos un nuevo miembro de una familia peculiar: el abuelo africano ciego. El juego base nos presenta a una familia de arqueólogos compuesta por un padre árabe, una madre indígena, un niño europeo que han adoptado o la prima asiática huérfana.
Gracias a su modo de juego, que ya comentamos en profundidad aquí, podremos ir nosotros mismos imaginando sus aventuras vividas gracias a cómo visten y los complementos que llevan y no conocemos previamente nada de ellos, podremos crearnos una idea propia sobre cada uno de ellos.
Las partidas, con o sin expansión, tienen turnos muy ágiles en los que iremos viendo qué hacen los demás jugadores en su tiempo para, cuando llegue el nuestro, poder actuar sobre nuestro tablero. Veremos que nos proporciona partidas dinámicas en las que no nos aburriremos en absoluto porque continuamente descubriremos cosas nuevas.
Con esta primera expansión del juego, tendremos nuevas variantes que podremos añadir a nuestras partidas, ya sea si utilizamos su personaje durante la partida o tanto si no lo utilizamos.
Cuando no la utilicemos pero nos encontremos una loseta de éste nuevo personaje, podremos librarnos de perder un turno si la usamos junto a otra que no sea de nuestro personaje. Si estamos usando su puzle de personaje y usemos la acción del saquito, podremos robar, siempre con los ojos cerrados, 2 losetas del saquito de otro jugador sin tener que ser éstas consecutivas.
En las otras variantes que incluye, deberemos sustituir algunas de las losetas del juego base por algunas de las que incluye esta nueva caja para adecuar nuestras partidas.
Otro beneficio de utilizar El abuelo es que podremos añadir un nuevo jugador. Ahora el juego llega hasta los 5 personajes y podremos ser más personas juntas las que disfrutemos de las partidas ¡siempre se agradece!
La interacción entre jugadores sigue siendo alta y eso de debe a que cuando aparecen determinadas fichas cuando las cogemos de la bolsa en nuestro turno, tendremos que poner o quitar componentes de tableros de otros personajes. Además están también las fichas de soplo de vida que irán y vendrán de nuestro tablero a otro o incluso las dejaremos en la caja del juego para poder recuperarlas después.
La rejugabilidad y escalabilidad de éste juego se mantienen igual cuando le sumemos la expansión.
Por un lado, recordar que su rejugabilidad es elevada porque tenemos diferentes modos de juego, el azar siempre está presente al coger losetas sin mirar de la bolsa de tela, tenemos las losetas de desierto que nos dejarán hacer acciones diferentes y los tableros a doble cara son otro punto más a favor en éste aspecto.
Su escalabilidad como ya sabemos es buena y cuántos más seamos, más posibilidades tendremos de que no nos salgan fichas de nuestro miembro de la familia y tengamos que ver rápidamente a cual de nuestros oponentes corresponde para poder colocarlas en su tablero.
Por concluir, queremos decir que ha sido un acierto lanzar esta primera expansión para Mi saquito de huesos porque le añade nuevos modos de juego, amplia el número de personas que podemos participar en una partida y nos presenta a un miembro de la familia entrañable que nos hará muy buena compañía sin modificar el buen funcionamiento del juego base.