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Soviet Kitchen

Soviet Kitchen es un juego de cartas cooperativo en el que tendréis que mezclar los ingredientes más descabellados para conseguir el color que os han pedido. Pero cuidado ¡La Madre Rusia no puede aguantar muchas recetas tóxicas!

Así se nos presenta Soviet Kitchen, un juego de cartas que nos trae la editorial Devir y que ha sido creado e ilustrado por Andreas Wilde.

Ficha

¿Cuál es su contenido?

  • 112 cartas
  • 1 reglamento

¿De qué trata?

Los suministros de comida ya no llegan a los puertos soviéticos como antes de la guerra y los restaurantes tienen que reinventarse para poder alimentar a sus comensales.

Deberemos combinar los colores de cachivaches de todo tipo para que se parezcan al plato original que ha pedido el hambriento ruso y, una vez dentro de la picadora veremos si el nivel de toxicidad no es elevado, cosa por la que podrán poner en duda nuestras dotes culinarias.

¿Cómo se juega?

Preparación

Antes de empezar a jugar deberemos seguir una serie de pasos muy sencillos:

  • Aseguraros de tener la batería del móvil bien cargada o un cargador a mano por si acaso.
  • Deberemos bajarnos la aplicación gratuita Soviet Kitchen de Google Play o de la App store. Si queréis que vuestras partidas estén disponibles en varios dispositivos deberéis crearos una cuenta en HYBR y de esa manera también podréis competir en el ranking de puntuaciones mundial.

La partida

En la aplicación nos viene un tutorial para poder aprender a jugar al juego también.

El objetivo de Soviet Kitchen es coordinarnos entre todos para conseguir la mezcla de color perfecta en cada comida y evitar que la Madre Rusia se intoxique mucho.

Deberemos ir superando todas las misiones y consiguiendo rublos. También podemos enfrentarnos a los retos una y otra vez para poder subir hasta lo más alto del ranking mundial.

Modos de juego

Tenemos varios modos de juego disponibles y podemos elegir a cuál enfrentarnos:

  • Modo historia: Incluye más de 21 misiones y nos harán desde cocinar en el rancho para toda la tropa hasta situarnos ante los fogones del Kremlin como si fuéramos un auténtico chef. Todas estas misiones tendrán objetivos, menús y expectativas de los comensales distintos.
  • Modo desafío: Para poder jugar partidas más rápidas y enfrentarnos a retos que hemos ido desbloqueando en el modo historia.
  • Modo en línea: Para poder jugar con vuestros amigos cuando estén en otra ubicación. Se necesita una copia del juego por ubicación y un canal para poder hablar.

Tras haber elegido uno de los modos de juego posibles, elegiremos el número de jugadores y mezclaremos el mazo de cartas.

Deberemos repartir las cartas que nos indique la aplicación, que dependerá de la misión y del número de jugadores que seamos. Aunque seamos un equipo, no podremos mirar las cartas de los demás jugadores aunque bien podremos hablar sobre ellas, pero siempre sin verlas.

Ya podremos empezar a completar nuestra misión y deberemos fijarnos en una serie de aspectos dentro de nuestro plato:

  • Coincidencia mínima de color: la que deberemos cumplir para no perder una vida.
  • Vidas: Vienen marcadas como matrioskas y veremos cuántas nos quedan. Si nos rechazan una comida o si alcanzamos el máximo de toxicidad permitido, iremos perdiéndolas.
  • Objetivo: lo deberemos cumplir para desbloquear la siguiente misión.
  • Objetivos extra: Por si queremos lucirnos.

Tendremos delante nuestra el plato que nos han pedido y tendrá componentes de distintos colores. Tendremos que mezclar los ingredientes que tenemos en nuestras cartas para que coincidan lo máximo posible con el color de lo que nos han pedido.

Cuando lo tengamos bien claro, pulsaremos el botón ¡A picar! para empezar con el primer ingrediente. Podremos hablar entre nosotros para encontrar la mejor manera de mezclar los ingredientes pero sin enseñarnos las cartas.

Habrá llegado el momento de ir escaneando las cartas. Cada uno de los jugadores jugará una carta de ingrediente y la deberá sostener a unos 20 cm por encima de la cámara frontal del dispositivo para que esta lea el código QR del dorso de la carta. Las iremos jugando en el orden que queramos y tras usarlo, las iremos dejando en la pila de descartes.

Tras haber escaneado todos los jugadores su carta, la aplicación comparará la creación con la comanda y nos indicará el porcentaje de similitud.

Para aumentar la dificultad, podremos jugar en el modo experto de modo que cada jugador elije la carta que va a jugar, la deja bocabajo en la mesa y luego se escanean todas de golpe para ver el resultado.

En la parte izquierda de la pantalla tendremos el toxicómetro que indicará el grado de intoxicación y/o radioactividad que hemos sumado con nuestras cartas. Después de cada plato, la intoxicación disminuye tanto como la cantidad restante sin intoxicar pero la radioactividad no se regenera de la manera habitual.

Cuando todos los componentes del plato de hayan creado, éste estará servido y los porcentajes de similitud de cada uno de ellos se sumarán para determinar la recompensa en rublos que recibiremos.

La propia aplicación nos dirá cuántas cartas debe robar cada jugador para el siguiente plato y pasaremos al siguiente plato para volver a crearlo.

Fin de la partida

No hay un final de partida marcado. Nosotros podemos decidir en todo momento cuándo paramos de crear platos y se guardará nuestro progreso en la aplicación.

¿Cuál es nuestra valoración?

Soviet Kitchen es un juego cooperativo que está causando furor en el que interactuamos mediante una aplicación  gracias a sus sencillas reglas, al pique que genera y a que nos propone algo muy novedoso con tan solo cartas.

Tendremos que conseguir cocinar lo que piden los comensales pero añadiendo todo tipo de objetos que encontremos que, mezclados, den como resultado el color del plato de la carta y conseguir así engañar por el ojo a esos hambrientos estómagos rusos.

Se basa en el uso de los colores y las combinaciones de estos para hacer que los participantes hablemos y cooperemos buscando tonalidades variadas, a veces casi imposibles, y nos echemos unas risas en muchas ocasiones al ver el resultado final de la mezcla.

En una caja del tamaño de una mano y muy manejable se nos presenta con una portada muy llamativa y colorida donde vemos a una Matrioshka con hoz y martillo como protagonista, símbolo ruso que todos conocemos y que lleva el gorro de cocinera para ponerse a cocinar rápidamente para los hambrientos comensales.

Dentro encontramos varios mazos de cartas unidos por fajas marrones en los que una carta roja inicial nos indica el capítulo al que corresponden. Las cartas vienen divididas en capítulos para que, según vayamos avanzando en el juego, vayamos desbloqueando nuevos ingredientes.

El primer capítulo incluye 55 cartas más la de presentación y el resto traen 13 cada uno más la carta de presentación del capítulo.

Nos ha encantado la estética que tienen y lo bien organizada que está la simbología en ellas. En el anverso tenemos una ilustración central en todas ellas, arriba nos indica el grado de intoxicación que tiene dicho objeto, debajo del objeto en pequeño, el capítulo al que corresponde dicha carta, en grande y con tipografía que nos recuerda a la rusa, el nombre del objeto bien visible. En algunas de las cartas, además tendremos una franja inferior con fondo oscuro si dicho objeto proporciona una habilidad adicional a tener en cuenta por todos los jugadores.

En el reverso, todas las cartas son iguales (o casi) ya que tenemos, rodeado por un círculo cromático de colores, el QR que deberemos leer con la app para que el color del objeto se añada a la picadora.

Para ponernos a jugar no necesitamos ni siquiera leer el manual ya que la aplicación nos irá guiando de manera interactiva para que podamos aprender sus sencillas reglas.

En la app tenemos un tutorial inicial en el que nos va explicando cada elemento pero luego, una vez conocido el juego, podremos jugar omitiéndolo.

Nos ha encantado cómo está estructurado, como te va indicando poco a poco los pasos a seguir y te das cuenta rápidamente de que las reglas son sencillas y estarás jugando antes de lo esperado. Será la propia app la que controle y mida nuestro éxito o fracaso en cada misión.

A través de los mensajes del dispositivo marcaremos cuántos jugadores somos y nos irá automáticamente indicando el número de cartas que tenemos que tener en la mano y cuántas robar tras haber completado un plato.

A través de una mecánica de gestión de mano, jugaremos una carta por jugador, acercando el dorso de la misma a unos 20 cm de la cámara frontal del dispositivo para que lea el QR y añada el elemento a la picadora. Nos deberemos apañar con cualquier cosa que tengamos para poder conseguirlo y añadir sus colores para intentar lograr el color final del plato ofertado.

Nos ha gustado mucho que, aunque haya elementos varias veces, como por ejemplo las granadas, los tejanos o las uñas, éstas tienen varias tonalidades, de modo que no podremos aprender cómo es una carta concreta para cuando hablemos con nuestros camaradas ya que el color variará y el haberlo memorizado no será válido porque puede ser diferente al que conocemos.

También debemos comentar el nivel de intoxicación que generamos a nuestro comensal con depende qué mezcla de ingredientes. Para conseguir el color que se nos pide debemos valorar si con una mezcla o con otra le intoxicaremos menos, que es lo que deberíamos intentar. Si el comensal come muchos “alimentos” tóxicos, podrá llegar a morir y no cobraremos los rublos indicados por ese plato, cosa que nos perjudica.

Hay cartas que restan intoxicación como es la del vozka y, si creemos haber encontrado la mezcla con casi todas las cartas pero un jugador aún no ha puesto la suya y tiene en su mano un vozka, nos vendrá bien ya que no añade color y encima mejoraremos el baremo de intoxicación.

Nuestro objetivo es darle de comer algo parecido a lo que pide para que su estómago pare de rugir pero sin pasarnos, que no queremos tener bajas.

Por el contrario, si el comensal ya está en las últimas y el marcador lateral de toxicidad ya está a tope, vendrá bien que si alguno de los jugadores puede descartarse de alimentos tóxicos lo haga, ya que se quitará cartas que ocuparán espacio en su mano y que quizá luego no le sirvan de mucho pero renueva los colores que tiene y tienta a la suerte para seguramente conseguir otro elemento menos tóxico.

Además, en cada misión, además de tener que crear los platos lo más parecidos a lo que se nos muestran, tenemos unos objetivos adicionales que cumplir como conseguir determinado número de rublos, llegar a un porcentaje concreto de similitud, no perder vidas y, como siempre vamos a tender a querer conseguirlos, estamos seguros de que os pasará como a nosotros: querréis volver a repetir una misión para intentar conseguir los que os habéis dejado por el camino.

Si además queremos aumentar la dificultad, podremos jugar en el modo experto donde deberemos elegir todos nuestra carta a la vez, dejarla bocabajo y luego tener confianza en lo que los demás han elegido de su mano para ver el resultado final.

Es un juego colaborativo en el que podremos hablar, opinar, contar qué cartas tenemos en la mano y describirlas pero no debemos olvidar que no podemos enseñárselas al resto de jugadores. Es fundamental trabajar como un equipo y tomar las decisiones de manera ordenada y debatida para que el plato salga lo mejor posible. De esa manera, fomentamos también la imaginación, las explicaciones y las asociaciones de cada uno de nosotros porque tendremos que saber explicarnos bien pero las otras personas también deberán esforzarse en entender bien a lo que nos referimos.

Ha sido muy gracioso ver como algunos describían a la perfección diferentes tonalidades de verde, otros siempre decían claro u oscuro y en cambio otros llamaban a algunos colores con unos nombres y un detalle que los demás nunca habíamos escuchado antes.

Un consejo que os damos es intentar tener en la mano un abanico variado de colores, que no siempre es fácil porque robamos cartas al azar del mazo común, pero de esa manera podremos ayudar más fácilmente a las mezclas que si solo tenemos tonos de marrón, colores muy oscuros o similares entre ellos.

El tema de que juguemos en paralelo con una app y mezclemos un juego de mesa tradicional con tecnología nos ha gustado mucho ya que no es un juego digital sino que se complementan ambos aspectos perfectamente. El uso de QRs sin duda ha sido todo un acierto ya que nosotros ponemos la mente y la app hace el resto, de manera super visual. En todo momento ha funcionado bien este sistema aunque si es cierto que hay que calcular bien la distancia a la que colocas el reverso de la carta para que el ingrediente se añada a la picadora.

Como hemos visto, las cartas vienen divididas en 5 capítulos para hacer un modo historia. Desde el principio no usamos todas las cartas de la baraja sino que iremos añadiendo diferentes tipos de ingredientes de manera progresiva e iremos viendo que las nuevas cartas podrán facilitarnos la tarea o dificultárnosla, dependiendo del momento en el que decidamos utilizarlas. Esto es algo que nos ha parecido genial ya que empezamos con una base, tanto de colores como de habilidades para, según cogemos experiencia, ir incrementando las opciones y las posibles combinaciones.

También tenemos el modo desafío que nos hará jugar de manera más rápida a diferentes retos que hemos podido ir desbloqueando y también podremos jugar en línea para enfrentarnos a jugadores de todo el mundo. Por si todo esto fuera poco, también podemos disfrutarlo en solitario y así ir entrenando nosotros mismos nuestras mezclas para cuando nos reunamos con otros tener más habilidad. Como veis, tenemos juego para rato.

Y hablando de habilidades…¡Qué gran idea ha sido que algunas cartas incluyan mini acciones adicionales! Esto, además de ayudar en ciertas ocasiones, es todo un acierto ya que añade un puntito más de planificación a la hora de jugar nuestras cartas ya que, en realidad, podríamos jugarlas en cualquier orden pero habrá ocasiones en las que será mejor que algunos lo hagan antes y otros después dependiendo de si alguna de las cartas jugadas tiene una leyenda en su parte inferior para hacer una acción adicional.

Lo bueno de que el progreso se guarde en la app es que no hay un tiempo de partida marcado. Podremos decidir en cualquier momento el parar de jugar o incluso si nos atascamos en alguna comanda, podremos parar para poder enfrentarnos a ella en otra ocasión.

Si pasamos a analizar su escalabilidad, es un juego que va bien a cualquier número, incluido el solitario pero queremos hacer algunos matices. No olvidemos que la propia aplicación determinará el número de cartas que deberemos tener en la mano, algo que simplifica los cambios a distinto número de jugadores, cosa que se agradece.

A 2 jugadores tenemos más cartas en la mano pero menos cartas habrá poner en la picadora lo que hará que pueda ser mas fácil conseguir el color que por ejemplo si lo jugamos a 3 ya que aumentan las posibilidades de mezcla y habrá que empezar a mezclar algo mejor.

A partir de 4 jugadores siempre habrá un color discordante que hará que tengamos que compensarlo con otros colores para obtener el bueno o incluso intentar usar objetos incoloros para no arruinar la mezcla de los demás si no contamos con colores aptos.

Respecto a la rejugabilidad de éste título, ni que decir tiene que las opciones son infinitas. Robaremos cartas a ciegas del mazo bocabajo y además, las combinaciones de colores que podemos hacer son tan altas que nunca repetiremos lo mismo ni veremos tonalidades iguales salir de la picadora. Algo que suma rejugabilidad es que iremos añadiendo nuevas cartas al mazo según avanzamos en los capítulos lo que nos hará descubrir nuevas tonalidades, objetos y habilidades para cocinar.

Por cerrar esta reseña, podemos decir que jugar a mezclar colores nunca nos había parecido tan divertido hasta conocer Soviet Kitchen. No se solapa con ningún otro juego de la estantería y es difícil que no te apetezca jugarlo y preparar unos cuantos platos ya que verás que te diviertes tanto que el tiempo pasa volando. Al tener unas reglas tan sencillas es apto para cualquier tipo de público, llega a resultar adictivo y lo hace aún más llamativo el hecho de que completemos la experiencia de juego usando la tecnología.

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Última actualización el 2024-10-07 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados

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