Three Wishes en un juego de intuición, conocimiento, empatía y percepción. En él tendrás que intentar hacer la mayor cantidad de puntos posibles adivinando los deseos favoritos del resto de jugadores. Apuesta, arriésgate y ¡gana tu deseo!
Así se presenta Three Wishes, un juego creado por Lorenzo Tabarini, ilustrado por Pablo de la Cruz y que nos trae la editorial Zacatrus.
Ficha
- Número de jugadores: 3 a 8
- Edad Mínima: 6 años
- Duración: 20 minutos
- Interacción: Competitivo
- Mecánicas: Voting (Votación), Simultaneous Action Selection (Selección simultánea de acciones en secreto), Storytelling (Cuenta historias).
- Versiones: No
- Expansiones: No
- Editor: Zacatrus
- Año de publicación: 2023
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¿Cuál es su contenido?
- 40 monedas
- 55 cartas de deseos, a doble cara
- 40 cartas de suposición
- 3 marcadores de preferencia
- 1 ficha de lámpara
- 1 ficha de genio
- 1 reglamento
¿De qué trata?
Estamos ante un juego de empatía e intuición en el que tendremos que intentar sumar el mayor número de puntos posible adivinando los sentimientos de los demás jugadores respecto a los deseos que aparecerán sobre la mesa.
¿Cómo se juega?
Preparación
Lo primero que tenemos que hacer es elegir al jugador inicial, que será la persona que haya hecho últimamente alguna genialidad. Se le entregará la ficha de lámpara.
Repartiremos las cinco cartas de suposición de su color a cada jugador y mezclaremos el mazo de cartas de deseo para dejarlo en el centro de la mesa.
Colocaremos el set de marcadores de preferencias y las monedas cerca de las cartas de deseo.
Tipos de cartas de suposición
Las distinguiremos por el símbolo impreso y cada jugador tendrá las siguientes:
- Símbolo +: Para indicar el deseo que más le puede gustar al jugador inicial.
- Símbolo –: Para indicar el deseo que menos le puede gustar al jugador inicial.
- Sin Símbolo impreso: Se colocará sobre el deseo sobrante.
- Bonus +2: Ganaremos dos puntos extra si acertamos todas las preferencias. Es limitado, se utiliza en vez de la carta neutra y tras su uso se descartará.
Desarrollo
Nuestro objetivo es intentar ser la persona que mejor conozca al resto de jugadores para que así el genio cumpla nuestros tres deseos.
Jugaremos por turnos y el turno de cada jugador está dividido en 4 pasos:
- Desplegar cartas de deseo
El jugador en turno desplegará las 3 primeras cartas de deseo en la mesa y leerá en alto el texto de cada una de ellas mientras los demás jugadores le escuchan. Ese mismo jugador colocará, bocabajo, sus marcadores de preferencias donde indicará qué deseo le gustan más, cuál menos y cuál le es indiferente. - Hacer suposiciones
Los demás jugadores deberán intentar adivinar las preferencias del jugador en turno y para ello colocarán las cartas de preferencia de su color, delante de cada deseo.
Si están muy seguros de lo que suponen, pueden utilizar sus cartas de bonus +2 en lugar de la carta neutra, que les darán más puntos si aciertan pero solamente tendremos dos por partida, por lo que hay que saber usarlas bien. - Revelar preferencias
El jugador en turno revelará sus deseos al resto de jugadores y volteará los marcadores. - Asignación de puntos
Ha llegado el momento de saber lo bien o lo mal que nos conocen nuestros contrincantes. Se dará la vuelta a las cartas de suposición y se irán repartiendo monedas, que equivalen a puntos, según corresponda.
– Se entregará 1 punto por cada suposición correcta y la carta neutra no genera puntuación.
– Se entregarán 2 puntos adicionales si se ha utilizado la carta bonus + 2 y todas las suposiciones han coincidido con las preferencias del jugador inicial.
– Al jugador en turno también se le entregarán monedas: Recibe 1 punto por cada jugador que haya adivinado todas sus preferencias.
Para terminar el turno, todos los jugadores recogen sus cartas de suposición (dejando a un lado las de +2 si alguien las ha utilizado) y se entregará la lámpara al jugador de la izquierda.
Comenzamos un nuevo turno jugando de la misma manera.
Modo de juego cooperativo
Nuestro objetivo será demostrarle al genio de la lámpara que le conocemos bien como para merecer que cumpla nuestros deseos.
Colocaremos la ficha de genio junto a la ficha de lámpara y separaremos 3 cartas de suposición del mismo color, sin usar las cartas de bonus +2.
Daremos los 3 marcadores de preferencia al jugador inicial y, tras mezclar el mazo de cartas de deseo, separaremos 24 cartas para jugar con ellas.
La partida estará dividida en 8 turnos divididos en 4 pasos:
- Desplegar cartas de deseo: El jugador inicial sacará 3 cartas de deseo y leerá cada una de ellas en voz alta, colocando después los marcadores al lado de esas cartas de deseo.
- Hacer suposiciones: El resto de los jugadores se pondrán de acuerdo en equipo y apostarán con las 3 cartas de suposición disponibles.
- Revelar preferencias: Se revelan los marcadores de preferencias.
- Asignación de puntos: Se comprueban los resultados y se da 1 punto por cada acierto pero 1 puntos al genio por cada fallo.
Tras los 8 turnos, se comparan los puntos del equipo con los del genio y si hemos obtenido más que él, habremos ganado.
Podemos ver en la siguiente tabla el resultado del enfrentamiento con el genio:
Fin de la partida
La partida terminará cuando uno de los jugadores tenga o supere los 15 puntos. Si se produce un empate, el jugador que menos veces haya tenido la lámpara, será el ganador.
¿Cuál es nuestra valoración?
Con Three Wishes lo pasaremos en grande jugando a meternos en la mente de los demás jugadores para adivinar qué es lo que más y lo que menos les gustaría de los tres deseos que colocaremos sobre la mesa.
En una caja pequeña, muy manejable y transportable, nos encontramos con unos colores perfectamente elegidos para representar la temática que rodea al juego: el genio y sus deseos, mezclando el color amarillo oro junto al azul con el que siempre se representa al genio de la lámpara.
En su interior, tenemos troqueles de buena calidad que incluyen los marcadores del jugador en turno, una figura del genio y otra de su lámpara y monedas de tres valores diferentes. Quizá las monedas podemos encontrar que son algo pequeñas pero en realidad eso las hace manejables y que no ocupen mucho en mesa.
Además, incluye dos mazos diferentes de cartas de buen gramaje y a todo color: por un lado, tenemos un mazo con muchos deseos que incluyen un título descriptivo con una ilustración de trazos sencillos representando a lo que hace referencia. Nos ha gustado mucho que vengan deseos en ambos lados de las cartas, es decir, aprovechar ambos para poder tener más deseos disponibles y así dar más variabilidad al juego.
El otro mazo está constituido por las cartas de votación de cada jugador y tienen un diseño llamativo en el que aparece una figura de genio poniendo caras según lo que representa, gustar, no gustar o neutro, que aparece simplemente el desierto. Las cartas de bonus + 2 tienen un diamante bien grande en símbolo de premio.
Pasando a hablar de su modo de juego, rápidamente todos sabremos jugar porque el desarrollo del turno es bien sencillo: Una vez que hemos elegido al jugador en turno, sacaremos 3 cartas de deseo sobre la mesa y los demás jugadores ya deberán ir pensando cuáles pueden ser los sentimientos de ese jugador respecto a ellas.
Es muy importante leer los deseos de dichas cartas de manera imparcial y sin hacer gestos para no dejar claras ni dar pistas sobre cuáles nos gustan más o menos.
Mientras los demás piensan, él debe colocar los marcadores bocabajo para dejar hechas sobre la mesa sus preferencias y los demás ir colocando bocabajo las cartas que crean que les darán puntos y pensando si es lo que más, lo que menos o lo que le daría igual al jugador activo.
Comentar el hecho de que tengamos dos cartas de bonus +2, que son limitadas y una vez utilizadas no podremos volverlas a utilizar, por lo que habrá que saber elegir el momento en el que utilizarlas. Gracias a esa norma, tendremos que saber en qué momento asumir el riesgo y tendremos que estar seguros de que vamos a estar en sintonía con el pensamiento del jugador activo. Si lo conseguimos, ganaremos más puntos tras acertar.
Una vez que todos hayamos votado, llegará el momento revelación y veremos cómo de bien conocemos al jugador en turno.
Cada persona que haya acertado recibirá 1 punto por cada suposición correcta pero la carta neutra no genera ninguna puntuación.
Daremos 2 puntos adicionales si alguien ha utilizado la carta bonus + 2 y todas sus las suposiciones han coincidido con las preferencias del jugador inicial.
El jugador en turno también recibe monedas, cogiendo 1 punto por cada jugador que haya adivinado todas sus preferencias.
Seguiremos jugando de la misma manera hasta que alguien consiga llegar a los 15 puntos.
equipo sumará todos los puntos que consigan para saber si han ganado al genio.
Es un juego perfecto para poder ver cuánto conocemos a los demás jugadores. Desde el primer momento podremos observar que la interacción que se produce durante las partidas de Three Wishes es muy alta ya que en todo momento deberemos expresar nuestra opinión, tanto si somos el jugador activo como si no. Una de las cosas buenas es que, una vez desvelados los sentimientos, podremos expresar si queremos el porqué de nuestras elecciones y argumentar nuestras decisiones.
Si hablamos de la escalabilidad, es un juego que va desde los 3 a los 8 jugadores y, aunque es perfectamente disfrutable a sus números bajos, 3 o 4 personas, cuando más brilla es siendo a partir de 5 personas. Habrá más pique, más interacción y más variabilidad de opiniones sobre las preferencias del jugador activo. Veremos más variabilidad de sentimientos y situaciones y podremos dialogar más sobre el por qué se han elegido cada una de las preferencias.
Su rejugabilidad es muy elevada, contamos con muchas cartas a doble cara, todas ellas con deseos muy variopintos y que irán saliendo de manera aleatoria, pudiendo estar mezclados con otros en diferentes rondas así como siendo una persona diferente de una partida a otra la que tenga que dar su opinión sobre ellos. Tendremos juego para rato y eso nos encanta.
Para concluir, decir que este juego nos proporcionará partidas distendidas en las que todos los presentes expondremos nuestros sentimientos y conoceremos mejor a los demás participantes. Muchas veces nos sorprenderemos de lo que otros opinan sobre ciertas cosas y en muchas ocasiones no pararemos de reírnos. Perfecto para cualquier tipo de público y que puede salir a mesa con regularidad.