Un juego de caminos y hojas cálidas. Cubre el suelo con las hojas de tu color para obtener la victoria.
Así se presenta este juego de cartas, dentro de la línea de juegos Pocket que ha lanzado Devir este 2024, cuyos autores son María Blasco y Enrique Blasco (autores también de Winter) y, de nuevo, las ilustraciones corren a cargo de Carlos Ureta.
Ficha
- Número de jugadores: 1 – 2
- Edad Mínima: 8 años
- Duración: 10 minutos
- Interacción: Competitivo
- Mecánicas: Pattern Building, Area Control / Area Influence, Modular Board
- Versiones: No
- Expansiones: No
- Editor: Devir
- Año de publicación: 2024
- Consigue Autumm en Devir
¿Cuál es su contenido?
- 18 cartas
- 1 reglamento en varios idiomas
¿De qué trata?
Iremos jugando cartas sobre la mesa, solapando unas con otras para formar un paisaje otoñal. Ambos jugadores alternarán sus turnos y deberán conseguir que la superficie de hojas de su color sea lo más extensa posible para superar la superficie del oponente y ganar.
¿Cómo se juega?
Preparación
Mezclaremos todas las cartas y las dejaremos sobre la mesa bocabajo. Podremos revelar la primera carta.
Desarrollo
El jugador inicial sacará otra carta y la colocará en la mesa, sobre la primera, tapando las zonas que considere.
El segundo jugador, antes de iniciar su turno, será el que deba elegir con qué color jugará cada uno de los presentes: rojo o amarillo.
Ya podrá sacar carta y jugarla sobre las presentes, que irán alternando sus turnos, haciendo lo mismo cada uno de ellos.
Cómo jugar una carta
En cada una de las cartas siempre vamos a ver cuatro bloques de hojas y siempre que juguemos una nueva carta, deberá hacerse sobre las de la mesa, colocándola en el mismo sentido. Podemos rotarla 180º pero no 90º.
Deberemos cubrir uno o dos espacios de hojas, solapando cartas y da igual si coinciden colores o no.
Jugaremos todas las cartas y habrá llegado el momento de ver quién posee el área más grande de hojas de su color conectadas. Contaremos los espacios conectados ortogonalmente adyacentes y apuntaremos esa puntuación para volver a jugar las siguientes rondas.
Deberemos jugar un total de 3 rondas de la misma manera para ir sumando tras cada una de ellas, nuestras puntuaciones.
Fin de la partida
La partida termina cuando se saca la última carta del mazo de cartas en la tercera ronda.
Será en ese momento en el que sumaremos los puntos de cada jugador anotados tras cada ronda y el que haya sumado más puntos, será el ganador.
Modo de juego solitario
Podemos jugar a Autumm de manera solitaria, modo en el que jugaremos con ambos colores a la vez.
Tendremos 3 tipos de retos distintos:
- Jardín: Al final de la partida escogeremos las tres áreas que tenga más hojas, de cualquier color, y contaremos cuántos espacios ocupa cada uno. La puntuación de nuestra partida el la menor de esos números.
- Equilibrio: Intentaremos conseguir tres áreas exactamente iguales que tengan el mismo número de bloques cada uno.
- Dos: lo que tendremos que conseguir es crear sólo dos áreas sin que haya espacios de colores sin conectar fuera de cada una de esas dos áreas.
¿Cuál es nuestra valoración?
Ha llegado una nueva oleada a la colección de juegos de pequeño tamaño Devir Pocket y hoy os traemos el primero de ellos, que además pertenece a una colección dentro de ésta línea de juegos de pequeño formato: 4 seasons o 4 estaciones, como bien nos indica el sello naranja que vemos en la portada. Ya os hablamos anteriormente de otro de dicha colección llamado Winter.
Como el resto de juegos de ésta línea de bolsillo, viene en caja pequeña, tiene un precio muy económico y podemos entender sus reglas en apenas 5 minutos.
Autumm es un juego para 1 o 2 jugadores que podremos jugar en apenas 10 minutos y que dejará sobre nuestra mesa un cuadro bastante otoñal, como pretende.
Su caja, del tamaño de la palma de la mano nos regala la imagen de una pareja de ancianos que observan agarrados un precioso lago con cisnes cuyos márgenes están rodeados de árboles en plena época de otoño. Es una imagen que apetece simular y que te transmite tranquilidad y relajación.
Su interior incluye unas pocas cartas, 18 en concreto, pero suficientes para plantearnos un reto cada vez que lo juguemos. La cuna, dividida en dos espacios también está tematizada y sigue la estética de las cartas mostrando los dos tipos de hojas que adoptarán los jugadores como propias.
Sus componentes no tienen texto por lo que es un juego totalmente independiente del idioma.
Pasemos a hablar del modo de juego y es que es tan sencillo que con apenas 5 minutos de lectura, ya podremos ponernos a jugarlo.
Para el modo de 2 jugadores, tras haber mezclado las cartas y formar un mazo, sacaremos una de ellas visible sobre la mesa.
El segundo jugador, antes de empezar su turno deberá elegir el color de las hojas con el que jugará la partida y podrá sacar una nueva carta para colocarla pisando, al menos, un grupo de hojas de la carta ya existente.
Así iremos alternando los turnos, desvelando cartas cada uno de nosotros y colocándolas sobre las de la mesa siguiendo siempre el mismo sentido aunque podamos rotarla 180º. Es decir, jugaremos todas en horizontal o en vertical.
Deberemos cubrir uno o dos espacios de hojas, solapando cartas y da igual si coinciden colores o no. Nuestro objetivo es que, tras jugar todas las cartas, veamos quién posee el área más grande de hojas de su color conectadas. Para ello, contaremos los espacios conectados ortogonalmente adyacentes y apuntaremos esa puntuación para volver a jugar las siguientes rondas.
Jugaremos 3 rondas de la misma manera y, tras sumar los puntos de la tercera ronda, veremos quién ha conseguido más y se proclamará ganador.
Además, lo podemos jugar en solitario. Jugaremos con ambos colores a la vez y podremos elegir uno de los 3 retos que se nos plantean: el modo jardín, en el que, al terminar la partida deberemos elegir entre las tres áreas que tengan más hojas, de cualquiera de los colores y contaremos cuántos espacios ocupa cada uno para quedarnos con la puntuación de la menor. Tenemos también el modo equilibrio en el que intentaremos conseguir tres áreas exactamente iguales que tengan el mismo número de bloques cada uno o sino, el modo dos en el que lo que tendremos que conseguir es crear sólo dos áreas sin que haya espacios de colores sin conectar fuera de cada una de ellas.
Como hemos visto, es bien sencillo de jugar pero en ocasiones, nada fácil de conseguir aumentar la zona de hojas de tu color y es cierto que hasta casi el final de la partida no sabremos cuál de los dos jugadores es el que se llevará la victoria.
La rejugabilidad de Autumm es muy elevada ya que, aunque a priori nos pueda parecer que con 18 cartas no haremos mucho, tenemos juego para rato. Las cartas saldrán al azar del mazo de robo y tendremos múltiples posiciones y lugares para poderlas colocar, por lo que iremos jugándolas según necesitemos en cada ocasión. Además el hecho de poder jugar en dos posiciones, horizontal o vertical, hace que las cartas cambien de una partida a otra.
Por terminar esta reseña, decir que Autumm ofrece más de lo que parece a simple vista y no debemos hacernos una idea errónea de éste juego. Es un juego para 2 jugadores, que también puede jugarse en solitario, que nos ofrece duelos rápidos pero a su vez sesudos si queremos hacernos con la victoria. Muy vistoso en mesa y muy transportable, estamos seguros de que se hará hueco en muchas mochilas para acompañarnos en viajes o excursiones y hacernos pasar buenos ratos.